Por qué “sigue tu pasión” es un mal consejo

En uno de sus artículos, Cal Newport nos cuenta una historia muy interesante.

Thomas trabajaba como empleado en el departamento de informática en un prestigioso banco de Inglaterra. No era el peor trabajo del mundo pero tampoco era un trabajo muy excitante.

Pero durante los tres años que estuvo en su puesto, Thomas se sintió constantemente infeliz. En el fondo sentía que había un mejor lugar para él, donde realmente pudiera desarrollar su verdadero potencial.

De un momento para el otro, decidió cambiarlo todo. Dejó su trabajo y fue a vivir a un monasterio budista en las montañas rocosas de los Estados Unidos.

Thomas había estado buscando toda su vida un trabajo perfecto, una vida perfecta, pero nunca la encontró. Hasta el momento en el que, según sus estándares, estuvo en el lugar perfecto: un monasterio, un espacio de tranquilidad y armonía.

Pero les puedo contar, desde mi experiencia practicando meditación budista, que es difícil escapar del sufrimiento y de la insatisfacción.

Durante los dos años que Thomas estuvo en el monasterio, lo único que “logró” fue darse cuenta que esa sensación de vacío e infelicidad, estaba con él todo el tiempo y que no importaba en qué lugar se encontrase, tenía que aprender a vivir con ella.

Ahora, si en el fondo te preguntas ¿es posible encontrar un poco más de quietud o satisfacción en lo que hacemos (es decir trabajo)? La respuesta según la psicología, es que sí, lo puedes alcanzar, pero no de la forma en la que te lo imaginas.

Al final de cuentas, Thomas regresó a su anterior ocupación, pero con otra perspectiva de su vida, y su trabajo.

Por qué las pasiones se hacen y no se encuentran

Tenemos respuestas variadas y a veces contradictorias sobre este tema.

Por un lado, tenemos el consejo más convencional: debes seguir a como dé lugar tu pasión. Esta respuesta presupone dos cosas.

Primero, que naciste bueno para algo. La palabra misma “pasión” nos da a entender que hay algo natural o “genético” a lo que estamos predestinados.

Y la segunda idea detrás de este consejo, es que si emparejas tu personalidad y tu trabajo, seguro vas a adorar lo que haces. Para eso sirve la orientación vocacional generalmente.

Todo esto quiere decir que, para encontrar un trabajo que nos guste, debemos hacer un ejercicio de introspección para saber qué nos apasiona y cómo somos. Y “sólo” encontrar el lugar perfecto dónde seamos felices.

¿Si ven la similitud con la historia de Thomas?

Este consejo tiene algunos errores básicos:

1. El “seguir tu pasión” es una especie de mito moderno en el que nos hemos enfrascado. Si todos hiciéramos sólo lo que nos gusta, muchas cosas en este mundo dejarían de hacerse.
2. La investigación sobre la motivación y sobre todo los trabajos de Carol Dweck, nos dicen que no es real eso de que eres “bueno” para algo y no eres bueno para otras cosas. Ella lo llama mentalidad fija y es uno de los mayores obstáculos en tu aprendizaje.

Por eso, desde hace al menos treinta años, la investigación científica sobre la motivación nos dice que esa no es la forma de encontrar satisfacción en nuestros trabajos.

Las tres necesidades básicas para que nos guste lo que hacemos

Edward Deci y Richard Ryan desarrollaron la teoría de la autodeterminación, que vino a dar una nueva perspectiva a las teorías sobre la motivación humana.

La principal conclusión a la que llegan es que las personas encuentran satisfacción en lo que hacen cuando sus actividades llenan estas tres necesidades psicológicas:

• Autonomía: libertad de gestionar el tiempo que dedicas a una tarea.
• Competencia: tener la posibilidad de estirar tus habilidades para alcanzar algún grado de experticia.
• Conexión y pertenencia: pensar y actuar para los demás, y que los demás piensen y actúen pensando en nosotros.

Para Cal Newport, esta forma de ver tu trabajo cambia la perspectiva del «trabajo perfecto» hacia un nuevo concepto de «trabajar correctamente».

Porque al final de cuentas, cuando comienzas un trabajo no tienes todas estas necesidades satisfechas. Pero a medida que desarrollas tus habilidades, puedes negociar más autonomía y más conexión.

La conclusión de Newport, nos abre las puertas a una forma diferente de relacionarnos con lo que hacemos.

La pasión no es algo que está en algún lugar interno para que lo descubramos, es más bien algo que se encuentra mientras desarrollamos pacientemente nuestras habilidades.

[Link Blog] Más allá de la pasión: La ciencia de amar lo que haces

☕ Energía para la mente

La pasión y el emprendimiento no se llevan bien

En este artículo nos cuentan por qué dentro del mundo del emprendimiento el consejo de “sigue tu pasión” tampoco es útil . Mucho de esto tiene que ver con que muchas veces tienes que hacer cosas que no nos gustan…

[Link Blog] Por qué «Sigue tu pasión» es el peor consejo para emprender

Si quieres construir tu cerebro digital

Si estás pensando en comenzar tu cerebro digital, una comparativa entre las mejores aplicaciones del mercado te puede ayudar a comenzar con el pie derecho. Inténtalo, a mi me han ayudado mucho.

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Las aplicaciones que cambiarán tu forma de trabajar

Sé que todos disfrutamos de la eterna discusión sobre cuál es la mejor herramienta para lo que sea que estemos haciendo. Si hablamos de productividad hay muchas en el mercado, pero si quieres ahorrar tiempo, esta guía con las mejores herramientas te puede ayudar.

[Link Blog] 10 herramientas digitales para aumentar la productividad diaria

???? Auto-coaching: preguntate esto…

Ahora que ya sabes que no necesariamente necesitas una pasión preexistente para que te guste lo que haces, puedes hacerte unas preguntas muy simples:

¿Qué habilidades estoy desarrollando en mi trabajo o emprendimiento? ¿Cómo puedo perfeccionarlas para mejorar mis posibilidades de tener más autonomía y conexión?

Al poner en claro las habilidades en las que puedes trabajar, te das un margen de mejora que te permite encontrar más oportunidades para aprender.

Y como vimos con la teoría de la autodeterminación, esa posibilidad te trae satisfacción y puedes desarrollar una verdadera pasión por lo que haces.

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