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Construye tu cerebro digital

Andrés Nieto

22 Junio 2021

cerebro digital

Si estás comenzando un emprendimiento o, aprendiendo una habilidad rara pero valiosa, estoy seguro que intentas devorar todo cuanto caiga en tus manos: libros, artículos de blog, videos o podcasts.

Pero el asunto es que, más veces de lo que uno quiere, leemos un artículo que pensamos nos sirve para aprender de marketing por ejemplo, tomamos notas en alguna libreta y luego nos olvidamos de lo que aprendimos casi instantáneamente.

Y lo más frustrante es que no logramos aplicar ninguno de los consejos.

Además de ese “pequeño” problema personal, hay que tomar en cuenta que hoy en día, en el internet, hay más información de la que podamos consumir.

Sólo en el 2020, se publicaron diariamente 2.9 millones de artículos de blog en WordPress, 47.1% más que en el 2016.

Estamos bombardeados de información por todos lados, y es difícil guardar ideas o información interesante que nos sirvan en nuestros proyectos.

En los años que se avecinan va a ser más y más importante desarrollar tu capacidad para mantenerte actualizado.

Por eso, es esencial tener un sistema que te permita consumir información y saber procesarla para aprender de verdad y no se quede todo olvidado en alguna libreta vieja en tu escritorio.

Hoy quiero hablarte del Cerebro Digital: un sistema que se creó con el objetivo de expandir tu cerebro, y guardar toda la información interesante en un solo lugar.

Futurista, no lo crees??!!

¿Por qué es tan importante escribir?

El famoso físico y premio nobel era muy bueno explicando ideas difíciles. Sus exposiciones eran muy didácticas y divertidas. Además, era un personaje carismático, tocaba el bongó y era extremadamente creativo. Incluso hay una técnica de estudio muy conocida con su nombre: la técnica de Feynman.

En una de sus biografías, , me llamó la atención un episodio de su vida.

Un historiador le hacía una entrevista en su casa de campo, y en un momento se sorprendió por todas las libretas de notas desorganizadas que Feynman tenía en su escritorio. Un espejo del pensamiento del autor según el historiador.

Pero Feynman le responde:

«No son un registro de mi proceso de pensamiento. Son mi proceso de pensamiento. De hecho, hice el trabajo en el papel».

«Bueno», dijo el historiador, «el trabajo se hizo en su cabeza, pero el registro todavía está aquí «.

«No, no es un registro, no realmente. Es el trabajo como tal. Tienes que trabajar en papel y este es el papel.»

Para Feynman escribir no era algo opcional, era el acto mismo de pensar. Y esto es algo muy importante en nuestro pensamiento.

Para recordar y procesar la información que llega a nuestro cerebro, necesitamos de algún soporte externo. De lo contrario es casi imposible crear nuevas conexiones o entender mejor lo que estamos aprendiendo. Nuestra memoria de trabajo es muy limitada y no podemos con todo al mismo tiempo.

Este proceso se llama . Es el principio en el que se asienta el cerebro digital.

En pocas palabras quiere decir que:

Tienes que procesar y guardar la información que consumes, ya sea escribiendo, conversando, dibujando, porque así es como piensas y aprendes.

Si no, todo queda en el aire, y ahí es cuando viene esa sensación incómoda de sentir que miras un video, te parece interesante, tomas notas, pero no aprendes de verdad.

Y por eso Feynman tenía tantas libretas en su escritorio y así, ganó un premio Nobel…

Tu cerebro digital

La idea del cerebro digital tiene sus bases en el (PKM) o Gestión del conocimiento personal y en algunas aplicaciones muy interesantes como el .

Pero la idea actual viene de Tiago Forte, un reconocido coach de productividad digital.

Tiago nos propone un sistema para procesar toda la información que consumimos diariamente, ya sea en nuestra computadora, en reuniones de trabajo o ideas que vengan a nuestra mente.

Y el proceso resumido y simplificado para crear tu cerebro digital es este:

  1. Recordar: El primer paso es capturar toda la información valiosa con la que te encuentres en un solo lugar. Y para eso nos da tres consejos: Piensa como curador, organiza tus hallazgos por proyectos y guarda sólo lo que te inspira.

     

  2. Procesar y conectar: El siguiente paso es crear tus notas, pero debemos intentar que sean prácticas y cortas, es decir debemos ir a lo esencial de cada idea.

     

  3. Crear: No sirve de nada si sólo escribimos notas, pues si quieres aprender, debes hacer algo con esa información. Y para eso Tiago Forte nos aconseja practicar la información que consumimos. Otra opción es compartir tus ideas con el mundo.

Toma cierto tiempo acostumbrarse a la idea de la gestión del conocimiento porque nunca nos enseñaron cómo aprender bien.

A mi, todavía me cuesta seguir el flujo de creación de notas y luego, aplicarlas en lo que estoy aprendiendo en el momento.

Pero por los resultados que he tenido, de verdad que hay un antes y un después…

Una herramienta: Obsidian

Podríamos pasar horas de horas discutiendo cuál herramienta es mejor para construir tu cerebro digital, estoy seguro que, si tú y yo nos levantamos con el pie izquierdo, podríamos tener una discusión acalorada 😈.

El punto es que no importa cuál escojas o cuál pienses que es mejor. Lo importante es incorporar este flujo de trabajo para que logres procesar la información que consumes y la apliques de verdad.

Pero ya que estamos en eso, te recomiendo .

¿Por qué?

Guarda tus notas localmente, no las almacena en ninguna nube propia, por lo que no tendrás ningún problema si decides llevarte tus notas a otro lado.

Y la segunda, la vista gráfica es maravillosa. Puedes ver cómo se conectan las notas unas con otras, y te permite tener una visión más global de tu conocimiento. Mira esta maravilla:

Esta es la foto actual de mi cerebro digital. Todavía es un bebito.

Nota: No recibo ninguna comisión por promocionar Obsidian, sólo pienso que es buena.

Crear tu cerebro digital tiene muchas ventajas. Desde el simple hecho de guardar tus ideas o ideas interesantes de otros, hasta la mejor de todas: aprender de toda la información que te llame la atención.

En esta época de información y contenido, se ha hecho indispensable crear un flujo de trabajo que facilite tu consumo de información. Es lo único que nadie te podrá arrebatar, ni tu jefe, ni tu mamá, ni siquiera el ministerio de educación.

Estará ahí para tí siempre, para que extiendas tus capacidades.


Si quieres explorar más sobre el tema te dejo algunos recursos interesantes:

La caja de notas

En los años 50, el sociólogo alemán Niklas Luhmann construyó su cerebro digital, pero en papel. Y gracias a él pudo escribir, solamente, 70 libros y más de 400 artículos académicos 🙃.

En este libro, Sönke Ahrens nos enseña como crear notas que sirvan. Una lectura que me abrió los ojos a la gestión del conocimiento.

El segundo Cerebro

Te dejo también el artículo original de Tiago Forte, es muy bueno y tiene consejos útiles.