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Cómo potenciar tu aprendizaje con la práctica

Andrés Nieto

23 Marzo 2021

¡Hola!

¿Cómo aprendemos? Esa es una pregunta general que nos puede dar respuestas generales,

¿Cómo aprendemos mejor? Es una pregunta más específica que nos puede dar respuestas más específicas.

Y para responder a esta última pregunta, esta semana vamos a intentar clarificar una aspecto muy importante del aprendizaje: la práctica.

 

La Plasticidad cerebral

Primero quiero que conozcas una característica muy importante de los seres humanos:

Nuestro cerebro tiene la capacidad de adaptarse a cualquier medio ambiente y aprender. Esta característica se llama .

Durante muchos años se consideró que las personas nacían inteligentes y mantenían esa capacidad durante toda su vida. Los mismo pasaba con las personas con una inteligencia promedio, mantenían una inteligencia promedio el resto de sus días. Según esta corriente científica, la inteligencia estaba en los genes.

Sin embargo, las investigaciones del , uno de los precursores del concepto de la plasticidad cerebral, desmintieron lo que afirmaban comúnmente los científicos.

Él trabajó con niños que sobrevivieron el holocausto en la segunda guerra mundial. La creencia popular nos diría que estos chicos habían experimentado situaciones muy difíciles y era casi imposible vivir normalmente en la sociedad.

Pero Feuerstein trabajó con ellos en un programa de ayuda escolar que logró mejorar sus resultados y ayudó a que puedan tener una vida digna.

Otros investigadores han tratado este fenómeno y nos dicen que la inteligencia innata es más un mito que una realidad.

Pero yo me pregunto, ¿cómo es posible que haya personas con un rendimiento superlativo y otras no?

Mozart era un genio de la música y lo de genio vino por sus genes. 😓

Pues, no. El nos dice que se encontraron nuevos datos biográficos de Mozart. Ahora sabemos que su educación musical comenzó desde muy pequeño (3-4 años), con un ritmo de estudio diario de al menos 5 horas. Su padre quería a toda costa hacer de sus hijos músicos de alto nivel, algo que él nunca pudo alcanzar.

El de Mozart es un ejemplo entre otros, y es que los estudios sobre las prácticas de los expertos, o como sus fundadores lo nombran, “la ciencia de la experticia”, nos dice que estos expertos son como son por su forma de aprender.

Y a todos los une una característica:

La práctica en al aprendizaje

Creo que todos algún momento en nuestra vida, cuando hemos querido estudiar matemáticas, hemos intentado memorizar formulas y ecuaciones. Y los resultados no fueron los mejores.

¿Por qué?

Para que en nuestro cerebro se formen conexiones neuronales fuertes, el aprendizaje tiene que estar directamente relacionado con la práctica de la habilidad que queramos aprender.

Si queremos aprender marketing no sirve de nada saber de memoria conceptos y fechas importantes, tenemos que saber cómo y cuando usar el conocmiento, y la única manera de hacerlo es aplicandolo en la vida real.

Si quiero aprender a jugar ajedrez, no basta con leer un libro sobre estrategia, tengo que jugar muchas partidas para saber exactamente cuando aplicar alguna estrategia.

Pero la práctica tiene algunas características: tiene que ser espaciada en el tiempo y tiene que ser activa.

La práctica distribuida

Existen muchas investigaciones al respecto y nos dicen que es mucho más efectivo cuando practicamos o estudiamos algún tema por un largo tiempo.

Por ejemplo, tenemos un examen de matemáticas en 10 días. Vamos a aprender mucho mejor si estudiamos una hora diaria, practicando ejercicios por ejemplo, que si estudiamos 10 horas seguidas el día anterior al examen.

Ser constante, así sea por poco tiempo, le permite a nuestro cerebro formar conexiones más fácilmente y así poder recordar la información más fácilmente también.

Practica como en la vida real

Otra característica importante de la práctica es que debe ser lo más parecida a cómo vayamos a usarla en la vida real.

Pongamos un ejemplo: si estoy aprendiendo matemáticas financieras, debo practicar como si estuviera aplicando ese conocimiento en mi trabajo o emprendimiento.

Si quiero que esa habilidad sea fluída, no puedo sacar en cada momento mis resúmenes, tarjetas mnemotecnias o preguntarle a mi amigo.

Estoy solo frente a mi actividad y tengo que poder recordar y saber cómo resolver los problemas.

Si quiero aprender guitarra, puedo aprender los acordes, pero algún rato tengo que tocar esa canción para toda mi familia.

Si estoy aprendiendo historia de América, puedo saber las fechas importantes, pero algún rato tengo que poder escribir un ensayo sobre las diferencias y similitudes de las grandes culturas americanas.

Practicar cómo si fuera de «verdad» hace que nuestra memoria se acostumbre a utilizar la información de la manera que necesitamos y/o queremos que sea utilizada.

La práctica es esencial en el aprendizaje, es por eso que esta semana quiero que pienses cómo puedes practicar lo que estás aprendiendo.

Tal vez ya tienes ejercicios, problemas, tareas con los que puedes comenzar.

Y si no los tienes es una buena oportunidad para buscar formas de practicar en tu aprendizaje.

Si quieres explorar más sobre el tema te dejo algunos recursos interesantes:

Práctica y negocios

En este artículo de La Nación, Andrés Hatum nos cuenta cómo se aplica la práctica deliberada en la dirección de una empresa. Un artículo muy interesante para tener un ejemplo de cómo aplicarla en un caso práctico.

La plasticidad cerebral y cómo potenciarla.

En esta entrevista con el Dr. José Luis Trejo, se explora la idea de la plasticidad cerebral y cómo se produce, qué es la reserva cognitiva y algunos consejos interesantes para mejorar tu capacidad cerebral.

Para entender más en detalle…

Si quieres ir más a fondo en la plasticidad cerebral, te dejo este muy buen artículo de Psicología y Mente:

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